Tipos de arco

Longbow (Tradicional)

El arco largo (longbow) inglés, también llamado arco largo galés, era un poderoso tipo de arco largo con cerca de 2 m de altura, usado por los ingleses y galeses durante la Edad Media, tanto para la caza como para la guerra.

 

En las islas británicas se tiene constancia por primera vez de esta arma cuando es utilizada por los galeses en el 633. 

 

En la tumba del faraón egipcio Tutankamón 1336/5 a 1327/5 a. C., se encontraron diversas armas, entre las cuales se encontraban 46 arcos.

 

La momia del hombre conocido como Ötzi, del período del Calcolítico (Edad del Cobre), encontrado en el lado italiano del monte Similaun, portaba un arco muy similar al ejemplo anterior de Rotten Bottom, con la cuerda del arco hecha de ortiga o fibra de lino.

 

Compuesto (Poleas)

El arco de poleas es un arco moderno que en los extremos de las palas tiene poleas por las que pasa la cuerda del arco. Se le suele llamar también «arco compuesto» por traducción de su nombre en inglés, compound bow, pero en realidad este término es erróneo pues el verdadero arco compuesto (en inglés composite bow) es mucho más antiguo y no usa poleas. Si se le llama «compuesto» es porque su cuerpo está compuesto por láminas de madera, hueso y tendones, una técnica de construcción de arcos que ya tiene varios miles de años de antigüedad. Los arcos de poleas, en cambio, fueron desarrollados y patentados en Estados Unidos en los años 1960 y se han ido haciendo cada vez más populares, tanto en tiro con arco deportivo como en cacería.

Recurvo (Olimpico)

El Arco Recurvo, junto con el de poleas, es el arco que compite a nivel Olímpico. Es similar al arco tradicional, solo que las palas tienen una doble curva, lo que incrementa la fuerza del arco y suaviza el disparo.

 

 

El uso del arco como sistema de competición comenzó a tomar  gran auge a raiz del reinado de Enrique VIII tras declinar el valor del arco  como arma de guerra después de la aparición de las armas de fuego en el siglo  XVI.  La existencia del tiro con arco quedó  garantizada por el reto y la diversión que supone su uso, y fue precisamente  dicho monarca, el que promovió el tiro con arco como deporte oficial en  Inglaterra.

 

Al contrario de lo que cree mucha gente, el tiro con arco no fue practicado en los juegos olímpicos de la antigüedad en Grecia. La primera vez que el tiro con arco apareció en unas Olimpiadas fue en París en 1900.